Hoy os traemos una manualidad de esas que son fáciles fáciles y que se pueden preparar con los niños de principio a fin: papel de scratch. Además ofrece doble diversión: por un lado mientras lo preparamos, y por otro lado cuando llega la hora de crear.
Seguro que la mayoría ya sabéis lo que es el papel de scratch, pero para los que no, son unas hojas de papel negro, que cuando las rascas con un palillo o un punzón dejan ver un fondo de colores, pudiendo crear diseños súper llamativos. Es una actividad muy relajante y creativa, podéis crear verdaderas obras de arte con ésta técnica.
Hasta ahora, siempre que lo habíamos usado había sido comprado, pero hace unas semanas probamos a hacerlo en casa y ¡ha sido todo un éxito!
Materiales
- Papel o cartulina blanca
- Colores flúor (rotuladores, témperas...)
- Forro adhesivo transparente
- Pintura negra
Procedimiento
Lo primero que haremos será pintar nuestro papel o cartulina con los colores flúor. Podéis usar el material que tengáis por casa: ceras, rotuladores, témperas... Nosotros usamos las temperas sólidas de PlayColor, porque tienen una gran variedad de colores flúor y secan muy rápido. Si no tenéis colores flúor, se pueden usar otros colores, pero cuanto más vibrantes sean, mejor quedará.
El objetivo es cubrir toda la superficie con colores. Podéis pintar como más os guste, pero de nuevo, cuanto más mezclados estén los colores, mejor se verá el resultado.
El siguiente paso es forrar nuestro papel con forro transparente. Con esto conseguiremos varias cosas: por un lado será más fácil rascar el dibujo, sin peligro de arrastrar la pintura que hay debajo. También conseguimos que los colores se vean más brillantes, por lo que el resultado será todavía más bonito. Por otro lado podremos reutilizar nuestro papel sólo rascando toda la superficie y volviendo a pintar. Este paso nos lo podríamos saltar, pero de verdad que vale la pena.
Por último sólo nos queda pintar toda la superficie con pintura negra. Nosotros usamos tempera, pero imagino que con acrílico quedará igual de bien.
Al haber cubierto el papel con el forro, tendréis que dar más de una mano de pintura, pero en ésta época del año seca muy rápido y lo tendréis listo en un momento.
¡Y ya está! Una vez terminado, solo nos queda ponernos a crear. Para ello necesitamos un palillo de madera o un punzón de los que usan los peques en el cole.
Es una técnica muy llamativa, con un resultado espectacular. Además, cómo ya os he dicho, es muy relajante ir rascando el papel. Ya veis lo fácil que es preparar el papel de scratch en casa. ¿Lo conocíais?
No sabia como se hacia es super facil
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